Queridas lectoras, ¿cómo empieza su 2021? Nosotras con ganas de seguir compartiendo información útil sobre la salud de la mujer y que la copa menstrual llegue a más mujeres en el Ecuador y el mundo.
El año pasado lo cerramos con un artículo que iluminó a muchas por aquí: 6 tips para mejorar tu rendimiento físico a través del ciclo menstrual. Ahora dejamos de lado el deporte para hablar sobre el poder que tienen las hormonas en nuestra estabilidad mental y menstrual.
Para hablar de este tema nos apoyamos en la conversación que tuvimos con Estefanía Sáenz, Psicóloga Clínica egresada de la Universidad San Francisco de Quito, sobre el ciclo menstrual y sus repercusiones en nuestra psicología.
SOMOS EL RESULTADO DE UNA DANZA CONSTANTE DE HORMONAS
Así es, si hay balance y armonía en ellas, nos sentimos estables y vivimos conforme a nuestra naturaleza cíclica… pero cuando algo altera ese equilibrio, empezamos a tener síntomas incómodos que nos dejan saber que algo internamente no anda bien.
Te presentamos a las protagonistas de nuestra cordura (o locura), y sus principales funciones en nuestra psicología y ciclo menstrual:
Estrógeno:
Es otra de nuestras hormonas sexuales femeninas.
Tiene influencia directa sobre la actividad de la glándula tiroides: a bajos niveles de estrógenos, alta actividad (hipertiroidismo), mientras que en altos niveles, reduce la actividad (hipotiroidismo).
Progesterona:
Es una de nuestras hormonas sexuales femeninas.
Tiene relación con nuestros niveles de líbido.
Tiene efectos importantes en nuestro cerebro. Por ejemplo, funciona como sedante, antidepresivo natural, e influye en la relajación física y mental.
Está estrechamente vinculada al equilibrio de nuestro ciclo menstrual, es decir, con niveles bajos de progesterona en el organismo, seríamos propensas a desórdenes menstruales como exceso o ausencia de sangrado
¿CÓMO NOS SENTIMOS FÍSICA Y MENTALMENTE EN CADA FASE DEL CICLO GRACIAS A ESTAS HORMONAS?
En un ciclo menstrual saludable y con un sistema hormonal equilibrado, así es como nos sentimos en términos generales:
Fase menstrual: días para soltar y descansar. Primer día de sangrado. Muchísima limpieza: eliminamos sangre, agua, restos de nutrientes, tóxicos. Días de labor depurativa emocional. En esta fase predomina el estrógeno.
Fase preovulatoria: días para planear. Sigue predominando el estrógeno. Dejamos de menstruar y estamos con más energía. Es la mejor fase para empezar cambios de hábitos e iniciar proyectos. El hemisferio izquierdo de nuestro cerebro está súper activo y nos ayuda con el pensamiento más estructurado y lógico.
Fase ovulatoria: días para crear (hijos/proyectos). Nos sentimos más atractivas, más sensuales y sexuales, con mucha energía creativa. La líbido sube y nos sentimos mujeres-creadoras, de hijos/humanos o hijos/proyectos. Predomina la progesterona.
Fase postovulatoria: días para mirar adentro. Sigue predominando la progesterona. Esta es la fase más larga y tiene dos etapas, la primera, después de ovular, y la segunda, la premenstrual. Dejamos de ovular y nos preparamos para el siguiente ciclo. En la segunda etapa empezamos a retener líquidos, a sentirnos más pesadas, a bajar el ritmo físico y prepararnos para menstruar.
¿CÓMO PUEDE AFECTARME UNA DESBALANCE HORMONAL?
Entre las múltiples formas en las que tu sistema hormonal puede desequilibrarse, mencionaremos algunas de las más comunes o que personas cercanas al equipo de OVA han vivido.
Cuando tu estrógeno o progesterona están desequilibrados, pueden manifestarse a nivel psicológico de diversas formas:
Tu líbido puede bajar y no necesariamente es por ser “asexual”. En ese caso, puede que tengas exceso de estrógenos o baja de progesterona.
Si sientes ansiedad o depresión que va más allá de lo que puedas comprender o controlar, puede que estés con altos niveles de estrógeno o déficit de progesterona.
¿Cólicos menstruales súper intensos? Quizás no necesitas pastillas, necesitas tratamiento para bajar tus niveles de estrógeno o subir tu progesterona. Recuerda que los cólicos que no te permiten moverte, no son saludables y son indicadores de algún desequilibrio hormonal interno. Nuestro ciclo es nuestro mensajero.
Un exceso de estrógenos puede derivar en hipotiroidismo, que a su vez puede hacer que se generen cuadros psicológicos o psiquiátricos importantes.
Sí, nuestras hormonas nos pueden hacer sentir que nos estamos “volviendo locas”, “depresivas”, o “perezosas”, y si no tenemos las herramientas e información, difícilmente sabremos identificar que sólo se trata de un desbalance hormonal y no de nuestra intención o disposición emocional.
La ingesta de anticonceptivos, malos hábitos de alimentación o sueño, altos niveles de estrés, predisposiciones genéticas, entre otros, pueden ser algunos de los factores que desencadenen un desbalance hormonal.
La copa menstrual OVA puede ayudarte a identificar un desbalance hormonal:
Usar la copa puede ser muy útil para saber la calidad y cantidad aproximada de sangre que menstruas en cada ciclo, y de esta forma puede ser una gran aliada al momento de detectar si estás pasando por un desbalance hormonal.
En un ciclo saludable, deberías menstruar entre 30 ml y 80 ml de sangre, y la duración tendría que ser entre 3 y 7 días.
Para tener una idea, te dejamos unas medidas de referencia de lo que recolecta cada una de nuestras tres tallas: Pequeña (P), Mediana (M), y Grande (G).
Talla Pequeña OVA: recolecta hasta 23 ml.
Talla Mediana OVA: recolecta hasta 28 ml.
Talla Grande OVA: recolecta hasta 34 ml.
¡Gracias por leernos!
Equipo de OVA
Nota: Es importante mencionar que las consecuencias de un desbalance hormonal va más allá de lo psicológico, aunque en este artículo nos enfocamos sólo en ese aspecto. El proceso del embarazo tampoco fue abordado pues pertenece a otra circunstancia del cuerpo a nivel hormonal.
Para este artículo tomamos fragmentos de la conversación que tuvimos con Estefanía Sáenz, Psicóloga clínica egresada de la Universidad San Francisco de Quito. También consultamos los siguientes textos sobre la progesterona y sobre el estrógeno.
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